Sistema Inmunológico Digital

Un DIS (o SID) mejora la resiliencia operativa, asegura la continuidad del negocio y reduce los riesgos. Conozcamos un poco más sobre ello.

10/7/20242 min read

En el contexto actual, una de las principales tendencias tecnológicas son los sistemas inmunológicos digitales (DIS, por sus siglas en inglés): una combinación de prácticas y tecnologías dirigidas a mitigar, en conjunto, la mayor cantidad de riesgos empresariales posibles. La ciberseguridad debe ser un componente omnipresente en todas las áreas de cualquier organización relacionadas con los servicios tecnológicos. Hoy en día, no existe un escenario completamente seguro, y las superficies de ataque se expanden constantemente. Esto resalta la creciente importancia de la mitigación de riesgos, que abarca la confidencialidad, la integridad de los datos y su disponibilidad.

De la observabilidad a la autorremediación
No se trata solo de detectar malware o prevenir ataques externos, sino también de proteger las aplicaciones y servicios de cualquier tipo de anomalía, como un error en el código del software, el mal funcionamiento de un servidor o la interrupción de un servicio en la nube. El objetivo es garantizar la continuidad del negocio y la resiliencia operativa desde cualquier ángulo.

En el núcleo de los DIS hay seis conceptos clave, todos interrelacionados. El primero es la observabilidad: la evolución de la monitorización que analiza continuamente e inteligentemente todo el panorama de TI, permitiendo anticipar problemas de manera proactiva para asegurarse de que ningún fallo afecte la experiencia del usuario. Vinculado a esto está la autorremediación: el desarrollo de capacidades de monitoreo sensibles al contexto y funciones de remediación automatizadas, lo que permite al sistema encontrar formas de resolver problemas en las aplicaciones. Además, el sistema aprende con el tiempo a medida que acumula casos, ganando precisión y velocidad.

En tercer lugar, las pruebas impulsadas por IA complementan la automatización de pruebas, permitiendo la creación de software de alta calidad, incluso sin intervención humana. La ingeniería del caos es otro factor esencial, que implica pruebas experimentales para descubrir vulnerabilidades dentro de un sistema complejo. En general, la experimentación se realiza primero en entornos de preproducción, y una vez que se acumulan suficientes lecciones, se implementa en operaciones reales.

Beneficios de extremo a extremo
Por último, la seguridad en la cadena de suministro de software se enfoca en posibles ataques mediante políticas de control, análisis de versiones, repositorios de datos y dispositivos comunes, y la gestión de riesgos de diversos proveedores. Los beneficios de los sistemas inmunológicos digitales van desde la capacidad de operar sin interrupciones reales hasta una reducción significativa en los costos asociados con el mantenimiento, la resolución de problemas o la recuperación ante fallas. Además, son fundamentales para proteger la reputación del negocio y asegurar a los usuarios que sus datos permanecerán privados y protegidos de principio a fin.

A pesar de todo esto, la principal ventaja es un aumento en la lealtad y el compromiso de los clientes, gracias a la experiencia mejorada que los DIS pueden ofrecer. De hecho, Gartner anticipa que, para 2025, las organizaciones que inviertan en la construcción de inmunidad digital incrementarán la satisfacción del cliente al reducir el tiempo de inactividad en un 80%. El esfuerzo valdrá la pena: según estimaciones de Nubiral, el tiempo de diagnóstico de un problema podría reducirse hasta en un 80%. En términos prácticos, eso sería suficiente para prevenir una caída del sistema.